En San Pedro la Laguna, vive una comunidad guatemalteca que decidió regresar a sus orígenes y ha decidido cambiar las bolsas de plástico por canastas de palma, servilletas de tela o envolturas con hoja de plátano.
Esta medida, adoptada legalmente en 2016, además prohíbe y multa el uso de popotes y bolsas de plástico con el objetivo de preservar el Lago Atitlán, que se había convertido en un vertedero de basura.
Este artículo es un resumen de la noticia original publicada por Intriper: “Un pueblo en Guatemala lleva más de 3 años sin utilizar plástico”.