Galicia: tierra asociada a la cultura celta, el descanso, la lentitud y el tiempo que parece detenerse. Se trata sin duda de la ecuación perfecta identificada por Turismo Slow Norte de Galicia, para contagiar a los empresarios de la región con el movimiento slow travel. En esta entrevista Verónica Álvarez habla con María Traveso sobre cómo el concepto slow gana fuerza, tanto en la oferta como en la demanda.
Verónica: ¿Cómo surge Turismo Slow Norte de Galicia?
María: Turismo Slow Norte de Galicia nace a partir de un proceso de formación participativa dirigida al sector empresarial, en el que se implicaron mayoritariamente mujeres responsables de alojamientos y que formaban parte (en ese momento) de la directiva de la Asociación de Empresarios Turísticos de la comarca de Ortegal. Durante estas mesas de trabajo surgieron varios temas que en un principio se identificaron para configurar una oferta turística en el destino (turismo industrial, turismo surf, rutas de senderismo, turismo marinero, etc).
Sin embargo, este grupo de empresarias sirvieron de locomotora para impulsar el Turismo Slow y contagiar a otros empresarios turísticos para empezar a configurar una oferta coherente con la percepción general asociaban al Norte de Galicia (“cultura celta”, “descanso”, “lentitud” y “tiempo que parece que se detiene”).
A partir de este momento, desde el ente de gestión, se empezó a trabajar sobre el Turismo Slow, empezando por la configuración de una oferta de recursos y servicios turísticos coherentes con la filosofía del Movimiento Slow.
Verónica: Mencionas que la idea surge a través de un grupo de mujeres, ¿disponéis de producto exclusivo para este género?
María: No, aunque la iniciativa surge de un grupo de mujeres gerentes de alojamientos turísticos, el proyecto se diseñó sin especialización, al menos por la parte del diseño y configuración del producto. Sí que han surgido, sin embargo, actividades orientadas para mujeres, aunque han sido de tipo puntual.
Un ejemplo de esto fue nuestro encuentro Esencia Mujer que llevamos a cabo el pasado año durante el mes de septiembre. Se trató de un fin de semana dedicado a retomar el contacto con el entorno y con uno mismo con actividades dedicadas al desarrollo personal y en contacto con la naturaleza. Este taller además fue puesto en marcha por una de las empresarias que formaban parte de la mesa de trabajo donde surge el Turismo Slow.
Verónica: ¿Cómo se diferencia el norte de Galicia de otros destinos que están desarrollando su modalidad de Slow Travel?
María: El Norte de Galicia como destino turístico cuenta con ventajas comparativas (basadas en los recursos), y con el potencial necesario para apostar por la diferenciación, basándose en el valor añadido del destino, la explotación sostenible del entorno y la mejora de los procesos de información para el turista.
Uno de los puntos clave para lograr esta diferenciación es la atención al cliente, que es comentada y valorada por todos los turistas. No sólo se destaca el destino por su posicionamiento basado en la naturaleza y diversidad del entorno, sino que se realza sobre todo la hospitalidad del territorio, como una característica intrínseca de los gallegos.
Precisamente sobre esta hospitalidad, junto a la calidad de su gastronomía y su patrimonio material e inmaterial, se crea la base del producto configurado en este destino y destinado al perfil de turista slow.
Se trata, además, de un destino muy acogedor, con un enorme patrimonio sociocultural y un gran potencial gracias a la riqueza de sus recursos y a la hospitalidad de sus gentes, propiciada y perfeccionada a lo largo de los siglos por las primeras visitas al destino: las de las personas que peregrinaban a Santiago de Compostela.
Verónica: Para llegar a desarrollar este concepto, ¿analizásteis las tendencias del perfil del turista slow?
María: Si, además a la hora de analizar el perfil del “turista slow”, fue especialmente interesante el hecho de que este tipo de turista prioriza el transporte público. Es en este momento cuando surge la posibilidad de incorporar en la oferta un elemento fundamental para vertebrar el destino y los desplazamientos internos: los trenes de la red ferroviaria de Feve del Norte de España que, por ser de vía estrecha, se caracterizan por su lentitud y las vistas espectaculares por la costa.
Contar con Renfe-Feve en el destino se convirtió en una prioridad puesto que permite incorporar un elemento atractivo para este tipo de oferta, ya que se ofrece un desplazamiento público con viaje regular y, por lo tanto, más sostenible.
Verónica ¿Qué puede encontrar un visitante que decida descubrir Galicia con vosotros?
María: Ofrecemos al visitante una experiencia a través de una vivencia sensorial, con valores emocionales, cognitivos y de relación con la gente del lugar. Una experiencia en la que se muestra la autenticidad del destino para garantizar la preservación de los recursos locales (tanto el patrimonio cultural como natural) y la toma de conciencia y respeto mutuo entre los turistas y las personas que viven en el territorio.
Se trata simplemente de una vivencia que preserva los estándares de calidad en turismo, pero maximizando los beneficios sociales y económicos para la comunidad local, el patrimonio y el medio ambiente, y la minimización de los impactos negativos.
Verónica: ¿El cliente busca esa diferenciación que estáis trabajando a través de la sostenibilidad?
María: Por lo general observamos que sí se busca la diferenciación con lo sostenible. Pero sobre todo se busca el trato cercano y la hospitalidad de las personas anfitrionas, interesándose por las recomendaciones que les puedan ofrecer en cuanto a actividades y zonas a visitar, recursos, etc.
Verónica: ¿Cuáles son vuestras perspectivas de futuro?
María: Como proyecto para el destino, el objetivo es posicionar el Norte de Galicia como un destino sostenible y de calidad, logrando un flujo de turistas estable a lo largo del año y adecuado a su capacidad, sin masificaciones, para asegurar unas actividades económicas viables pero dando un uso óptimo a los recursos ambientales y manteniendo los procesos ecológicos esenciales.
Queremos atraer a turistas con conciencia, que vengan a pasar una estancia de varios días y a disfrutar, de forma respetuosa, de las emociones que les despierten los diferentes recursos y experiencias que encontrarán, pero que no nos hagan perder la identidad sociocultural propia, sino que se integren en el estilo de vida del Norte del Norte.