1: El nivel del mar esta subiendo más rápido ahora que en los últimos 2,800 años
Un artículo publicado recientemente en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias, examina las variaciones en la elevación del nivel del mar en los últimos siglos. Este informe se suma a la creciente colección de evidencias que reiteran que la humanidad está contribuyendo a un aumento rápido de la temperatura global del planeta y en consecuente, a un aumento del nivel del mar.
Stefan Rahmstorf, co-autor del estudio y profesor de oceanografía física, afirmó que ‘definitivamente podemos estar seguros de que la subida del nivel del mar va a seguir acelerándose si sigue habiendo calentamiento global, lo que inevitablemente habrá”. Haciéndose eco de la frustración de numerosos científicos anteriores que se han enfrentado a la negación de muchos acerca del cambio climático, agregó “el hielo simplemente se derrite más rápido cuando las temperaturas son más altas. Esto es simplemente, la física más básica”
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2: Turismo con fecha de caducidad: ¿maldición o bendición?
¿Qué tienen en común el ablancamineto de la Gran Barrera de Coral, la subida del nivel del mar en las Maldivas y la inminente extinción de los osos polares? El llamado ‘turismo con fecha de caducidad’, una actividad en el que los turistas son testigos de la destrucción de los ecosistemas o de la extinción de las especies, – sean bienvenidos al espectáculo.
El turismo de ultima oportunidad (también llamado ‘turismo de la fatalidad’), es un tipo de turismo muy selecto donde los turistas buscan destinos o especies en vísperas de desaparición. Este atractivo bien puede incrementar las oportunidades comerciales para determinados proveedores a corto plazo, pero también deben ser considerados los riesgos a largo plazos y los problemas éticos que puedan surgir.
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3: El colosal coste del blanqueamiento de la Gran Barrera de Coral en el turismo
La investigación publicada el pasado 20 de junio, por The Australia Institute, reveló que el impacto ambiental del turismo en la Gran Barrera de Coral continúa agravándose. El grupo de expertos, advierte que si el blanqueamiento del coral continúa, podría significar un fuerte decrecimiento en el número de turistas nacionales e internacionales, casi un millón de personas al año. Esto supondría que los turistas chinos, claves para la economía australiana por el gasto que generan en destino, estarían dispuestos a viajar a otros destinos, tal y como indica el informe.
El decrecimiento turístico relacionado con el blanqueamiento de la Gran Barrera se traduce en la pérdida de un volumen de ingresos por turismo de 1 billón de $AUS, y por consiguiente unos 10.000 puestos de trabajo en la región de Queensland.
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4: Viajar en avión y practicar turismo responsable, ¿es compatible?
Tras la Conferencia Anual COP21, el Acuerdo de París fue aprobado bajo un absoluto consenso. Sorprendentemente, el transporte aéreo y la industria del turismo apenas fueron nombrados en este debate, a pesar de que la industria de los viajes es responsable del 5% de las emisiones globales de CO2.
Si todos los sectores económicos trabajaran en reducir su huella ecológica, se esperaría que el sector turístico hiciera lo mismo, lo que en este sector se traduciría en una reducción del tráfico aéreo. Sin embargo, este no es el caso. En los últimos años, los viajes en avión han pasado de representar un 3% a un 5% del total de viajes realizados. Los avances tecnológicos que logren reducir los impactos negativos en el medio ambiente producidos por la utilización del avión y que por tanto logren reducir el consumo de combustible, tan solo representan un 1%. Se hace evidente la brecha producida por la relación entre la frecuencia de los viajes y los avances en la tecnología que reduzca los impactos negativos en la atmósfera. A ello se suma que la Organización Mundial del Turismo ha admitido que el crecimiento del sector turístico al ritmo actual podría aumentar sus emisiones de CO2 en un 150% en 30 años.
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5: Las etiquetas de emisiones de carbono no comunican de manera persuasiva
¿Cuándo fue la última vez que compensaste tus emisiones de carbono? Esto puede ser debido a que las etiquetas de carbono fallan en su comunicación. Un estudio de Stefan Gössling y Ralf Buckley muestra que las etiquetas de carbono tienen deficiencias en la presentación de información y explica cómo se pueden superar tales deficiencias.
Los resultados indican que incluso si los turistas se preocupan por sus impactos en el cambio climático, las etiquetas de carbono son actualmente ineficaces debido a deficiencias en la comunicación.
Las etiquetas no proporcionan información que se pueda entender. El conocimiento factual es principalmente kg CO2 o CO2-e, por persona o por unidad de distancia / consumo, con clasificaciones e infografías de colores. Un menor número de etiquetas proporcionan información para comparar el rendimiento con productos similares, y aún son menos las que explican la eficacia del ahorro, es decir, el ahorro real o el impacto evitado.